EN EL AÑO 1969 FUI POR PRIMERA VEZ AL TEATRO COLÓN.
AHORRANDO DEL DINERO QUE ME DABAN MIS PADRES PARA MIS GASTOS, DEBÍA DECIDIR A QUE FUNCIÓN IBA. YA QUE LOS AHORROS DABA PARA UNA SOLA, LA EXTRAORDINARIA DE DIVULGACIÓN.
MAGNÍFICA INICIATIVO DEL TEATRO EN AQUELLAS ÉPOCAS, POR LA CUAL ADEMÁS DE LAS FUNCIONES DE ABONO, Y LA FUNCIÓN EXTRAORDINARIA, FUERA DE ABONO, ESTABA LA EXTRAORDINARIA DE DIVULGACIÓN, QUE COSTABA BASTANTE MENOS QUE LAS OTRAS, PERO CON EL MISMO ELENCO.
O TEMPORA, O MORES...
EL REQUISITO: PASARSE TODA LA NOCHE HACIENDO COLA, HASTA QUE ABRÍA LA BOLETERÍA A LAS 10 DE LA MAÑANA.
LUEGO DE ARDUAS ELUCUBRACIONES, ME DECIDÍ POR LA TRAVIATA, CON JOAN SUTHERLAND, COMO VIOLETA, RENATO CIONI COMO ALFREDO GERMONT Y PIERO CAPUCCILLI COMO SU PADRE GIORGIO EN LOS PROTAGÓNICOS, DIRIGIDOS POR EL ESPOSO DE SUTHERLAND, RICHARD BONYNGE.
LA VERSIÓN NO CONFORMÓ AL ENTONCES EXIGENTE PÚBLICO PORTEÑO.
Y POR MI MALA DECISIÓN, ME PERDÍ UN TROVATORE HISTÓRICO, CON PRYCE, CARLO BERGONZI, FIORENZA COSSOTTO Y NUEVAMENTE CAPPUCCILLI, DIRIGIDOS POR OLIVIERO DE FABRITIIS.
COMO DICE EL TANGO: "LOS AÑOS JUVENILES, LA FALTA DE CONSEJOS"...
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